Más allá del abismo hay abismo,
más allá del tiempo hay tiempo,
nada encontrarás buscando más allá,
ante tus ojos se presencia cuanto debe ser
visto.
Reconoce la Vida, ríe en su vientre,
ama a quien llega y a quien marcha,
ama el destino de todos
sin anhelar abandonar el curso.
La soledad de la pregunta fue ilusoria,
La Verdad no llegó a pronunciarse,
lo hizo el terror en su lugar,
voluntad rebelada contra la Voluntad,
fin y principio en oposición al origen,
sollozo que reverbera en la boca del pozo,
deseo de muerte
o la Muerte misma.
Mas aquel cuervo blanco que graznaba en la
profundidad
tras purificar sus ojos y su pico
ha alzado el vuelo.
Cuanto ves es su sombra
instantes antes de deshacerse en polvo.
Cuanto escuchas es el eco de su canto
instantes antes de fundirse en el silencio.
